DULCE DE TOMATE

Mirad como tengo las tomateras

Estamos sacando mínimo una caja semanal y cuando ya hemos repartido a la familia y amigos, con lo que queda, que es mucho, pues hay que hacer algún tipo de conserva. Hoy os presento mi dulce de tomate, que es la conserva que más me gusta hacer; lleva mucho tiempo, pero el resultado es tan bueno, que merece la pena. Para desayunar con tostadas y requesón, con galletas en la merienda o en un yogur, o cuando tengáis invitados como aperitivo, queso fresco a la plancha con dulce de tomate... Ideas a montones para una receta fácil y económica.

Os voy a poner la receta sencilla, para que calculéis por kilos, yo hice mucha más cantidad.

Ingredientes:

• Tomates
• Azúcar
• Corteza de limón
• Rama de canela

Modo de preparación:

Preparar una olla con agua y llevar a ebullición; hervir los frascos donde vayamos a conservar el dulce y secar. Reservar.

Utilizaremos ese agua para escaldar los tomate, para facilitar su pelado.

Yo suelo hacer en la base del tomate una cruz con un cuchillo y voy depositando los tomates en la olla; no tiene que estar más de 30 segundos. Tenemos preparado un bol con agua y hielo y conforme sacemos los tomates de la olla los dejamos unos segundo en el bol, de esta manera la piel se desprende muy fácil.

Troceamos los tomates sin la piel y le vamos quitando parte de las semillas y dejamos en otro bol.

Con los tomate limpios, le quitamos parte del agua que han soltado y hacemos la pesada.

Por cada kilo de tomate limpio pesaremos 700g de azúcar y lo dispondremos en una olla grande. Echamos la cáscara de un limón y una ramita de canela. Vamos cociendo la mezcla sin dejar de remover y ahí viene el susto, más o menos unas dos horas. Tenéis que ver que no queda muy caldoso el dulce. Una prueba fácil es que cuando ya le veáis la pinta adecuada, coger con una cucharita un poco del dulce y ponerlo en un platito, dejad enfriar y empujad con el dejo y si se forma una arruguita quiere decir que está listo.

Bueno, llega el momento del envasado, rellenamos los botes que antes habíamos esterilizado y los tapamos bien. Disponemos en una olla los botes y cubrimos casi hasta la tapa con agua. Hervir unos 15-20 minutos. Para que no hagan ruido los botes chocando entre sí y para que no boten tanto al hervir el agua, poner un paño en el fondo de la olla, se hará más silencioso el proceso.

Cuando estén esterilizados los sacamos con mucho cuidado y los ponemos boca abajo sobre un paño y los dejamos así hasta que se enfrien totalmente.

Hacemos unas etiquetas poniendo la fecha de envasado y dulce de tomate para todo el invierno. !Qué bueno!

177kcal/100g

Este dulce aporta básicamente hidratos de carbono de absorción rápida, por su contenido en azúcar, la cantidad de proteína y de grasa que aporta el tomate es mínima.

El contenido en vitamina A y vitamina C (ácido ascórbico) es alto, pese a la larga cocción, que hace que se degraden la mayor parte de las vitaminas.

El tomate es rico en potasio y fósforo y su contenido en fibra no es nada despreciable.

El licopeno es el pigmento responsable del color rojo que presentan los tomates (y también pomelos, sandías, pimientos, etc,) y es un potente antioxidante, que, junto con las vitaminas A y E, contrarrestan el efecto novivo de los radicales libres.